Auto-lesión en el Síndrome de Lesch-Nyhan

Una característica sobresaliente y distintiva del Síndrome de Lesch-Nyhan es el comportamiento autodestructivo, ligado a un trastorno obsesivo-compulsivo muy intenso.

Desde los dos años de edad, los niños comienzan a morder constantemente las yemas de sus dedos, sus labios, la lengua y el interior de su boca.

A medida que van creciendo, la auto-lesión se agrava relativamente llegando a casos extremos como la mutilación; y finalmente, se requerirán restricciones físicas y mecánicas que impidan golpes en la cabeza y las piernas, perforaciones en la nariz, pérdida de dedos y labios a causa de las constantes mordeduras, y de la visión por frotarse excesivamente los ojos, etc.

Deben modificarse o adaptarse las sillas, cama, mesas, el baño, etc., cuidando de no dejar bordes o colocando espuma que impida que el paciente se lastime con ellos.

Además, los niños mayores y adolescentes pueden volverse física y verbalmente agresivos.

No se sabe con certeza la causa de estos comportamientos. Sin embargo, algunos expertos aseguran que están relacionados con anormalidades en químicos cerebrales llamados neurotransmisores y, aunque, se haga hincapié al niño de no lastimarse, es incapaz de obedecer, pues las personas con SLN hacen lo contrario de lo que realmente desean.