La naturaleza es muy sabia y es por ello que desde tiempos remotos, ha proporcionado a la humanidad los recursos suficientes para satisfacer toda clase de necesidades, desde la alimentación como tal, hasta el uso de las propiedades que las plantas poseen para el alivio o el combate de algunos malestares o enfermedades; lo cual, derivó años después, en los principios de lo que ahora es la medicina como ciencia. A partir de esta práctica milenaria, se profundizó el estudio de las distintas especies vegetales que contienen propiedades medicinales y surgió lo que actualmente se conoce como herbolaria. Se le conoce como herbolaria o bien, fitoterapia, a la utilización de algunas especies vegetales con fines medicinales, curativos y terapéuticos; lo que abarca de igual forma, el conjunto de conocimientos relativo a las propiedades de dichas especies. Aunque la herbolaria se centra en una filosofía diferente a la medicina moderna, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha reconocido el valor de esta práctica como un tratamiento que además de eficaz, es inofensivo para la salud y que tiene la posibilidad de ser aprobado por autoridades nacionales en el ámbito de la salud pública. Por ejemplo, hoy en día es bastante común la prescripción de pastillas naturales o algún tipo de hierba para aliviar un malestar o una infección. Actualmente, el 80% de la población mundial recurre a las plantas medicinales, ya sea para satisfacer sus necesidades de salud o complementarlas junto con la medicina moderna. Asimismo, estos remedios naturales son ofrecidos al público bajo diferentes presentaciones, como hierbas secas (utilizadas en infusiones), pomadas, aceites, capsulas, pastillas, sistemas florales y tinturas (presentadas en frascos con goteros). |