El jugo elaborado con apio, zanahoria y tomate ayuda a calmar los nervios y es además un buen remineralizante. Sus pencas pueden comerse rellenas o pasadas por huevo, harina y luego fritas son deliciosas. Como parte de una ensalada le da un sabor particularmente agradable, especialmente mezclado con nueces, zanahorias ralladas, manzana verde y mayonesa. También podemos hacer un rica sopa de apio o como condimento en estofados y acompañando el pollo o pescado. Fuentes: Autor:Ale Núñez. L.C.C. |