No hay ningún examen específico para diagnosticar el síndrome de las piernas inquietas, sin embargo cuando el paciente presenta cualquiera de los síntomas siguientes deba acudir al médico: - Una necesidad urgente de mover las piernas, acompañada generalmente de una sensación incómoda en las extremidades. - La necesidad de moverse o incomodidad en las extremidades, que comienza cuando se inician periodos de descanso. - Esas sensaciones poco placenteras en las extremidades son parcialmente disminuidas por el movimiento del paciente. Generalmente al caminar, haciendo estiramientos, etc. - Las sensaciones incómodas en las extremidades es mayor en los periodos de tarde/noche, siendo menos probables por la mañana. Tratamiento Este trastorno no tiene cura, por lo que el tratamiento esta enfocado a reducir el estrés y ayudar a la relajación muscular mediante técnicas como los baños calientes, ejercicios de estiramiento suave y masajes. Para las interrupciones graves del sueño a causa de este trastorno el médico puede prescribir un medicamento antiparkinsoniano o tranquilizantes que por otro lado pueden causar somnolencia diurna. Para los pacientes cuya causa de este transtorno es la deficiencia de hierro recibirán suplementos de este elemento. En algunas ocasiones bajas dosis de narcóticos pueden aliviar los síntomas del síndrome de las piernas inquietas; consulte a su médico para que le de las indicaciones y dosis correcta. |
Síntomas y efectos del Síndrome de piernas inquiet |
Síndrome de las piernas inquietas (SPI)
Vida saludable