Generalmente los niños se recuperan de las paperas aproximadamente al cabo de entre 10 y 12 días, ya que cada glándula parótida tarda aproximadamente una semana en desinflamarse, y las dos glándulas no suelen inflamarse al mismo tiempo. Prevención La mejor manera de prevenir las paperas es administrando la vacuna pertinente. Ésta se puede administrar sola o como parte de la triple vírica (la vacuna que protege de las paperas, la rubéola y el sarampión), que suele administrarse a niños de entre 12 y 15 meses de edad. La segunda dosis de la triple vírica se suele administrar entre los cuatro y los seis años, o entre los 11 y 12 años si no se había aplicado antes. Cuando existen brotes de paperas, es posible que el pediatra recomiende dosis adicionales de la vacuna, sobre todo en niños de 1 a 4 años. Los chicos de preparatoria o universitarios si todavía no se han vacunado contra las paperas, deben asegurarse de recibir dos dosis de la triple vírica. Recuerda Esta información no sustituye la visita al médico. Fuentes: |
Tratamiento contra las paperas |
Paperas
Padecimientos y la alimentación