 Es una rotura parcial o total de las fibras musculares y todo lo que rodea al músculo como el tejido conjuntivo que a su vez rodea los vasos sanguíneos por lo que
se acompaña de sangrado interno y dolor muy intenso que impide contraerlo. Un desagarro es diferente a un "esguince" o torcedura, ya que éstos últimos están relacionadas con lesiones de los ligamentos (tejido elástico que mantiene juntos
los extremos óseos en una articulación). Aquellos músculos que han sufrido recientemente lesiones de cualquier tipo y que aún no están curadas del todo, tienen bastantes posibilidades de sufrir una
rotura, por ello es tan importante atenderse. Esta rotura del tejido muscular ocurre por causas directas e indirectas. Causas directas 
- Sedentarismo, ya que se debilitan las fibras musculares dejándolas mas expuestas a sufrir un desgarro.
- Por desnutrición porque se debilita la capacidad contráctil de las fibras musculares, que por una deficiente alimentación se adelgazan.
- Circulación arterial y venosa deficiente, ya que al no aumentar la irrigación sanguínea ante la exigencia del ejercicio físico, fatiga al músculo por falta de
oxígeno y por acumulación de ácido láctico; sustancias de desecho que al no eliminarse adecuadamente provocan una probable intoxicación del músculo.
- Ciertas enfermedades del metabolismo, por ejemplo la diabetes.
- Exceder al músculo más allá de su capacidad de estiramiento.
- Estirones súbitos.
- La práctica de deportes de contacto. Los desgarres son muy frecuentes también en aquellas personas que practican karate, taekwondo o disciplinas en las
que se dan patadas altas, debido a un mal entrenamiento de la elasticidad o por intentar dar patadas laterales o circulares lo más alto posible, sin tener en cuenta
las limitaciones físicas de cada persona.
- Cuando se somete al músculo a carga excesiva cuando está fatigado o no se ha calentado lo suficiente.
- Golpes o caídas también pueden originar esta lesión
Causas indirectas 
- Tras un ejercicio prolongado, ya que los músculos van perdiendo elasticidad al perder hidratación.
- Tener un músculo con agujetas, son pequeños cristales de ácido láctico que se encuentran en el interior del músculo; cuando no se hace suficiente
calentamiento estas agujetas no se funden lo suficiente, por lo que resulta como tener alfileres dentro del músculo que desde luego cortan pequeños haces de
fibras. Puede ocurrir en todo el cuerpo, pero principalmente lo sufren los abdominales inferiores, sobre todo al día siguiente de una sesión intensa de flexiones.
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